Talleres de coches hay muchos. Una gran cantidad de ellos, con la calidad suficiente como para adaptarse a las necesidades de los usuarios. Sin embargo, y como suele suceder en prácticamente la totalidad de los casos, siempre habrá un valor diferencial en diferentes negocios, haciendo que sean los ideales.
Por esa razón, cuando se trata de encontrar un taller de coches que tenga los servicios necesarios, la calidad adecuada y una forma de operativa que deje conforme a los usuarios, es recomendable partir con bases y conocimientos, para que la elección sea la mejor independientemente de la situación particular que se requiera para el mantenimiento del coche.
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La experiencia profesional
No quiere decir que un taller recién abierto no pueda tener la calidad y la innovación requeridas para llevar a cabo diferentes trabajos, pero lo usual es que siempre se apueste por empresas que llevan años o incluso décadas en el sector, donde sus profesionales están cualificados y especializados para cada uno de los servicios que ofrecen.
Al tratarse de coches, con la seguridad, el rendimiento y el confort que deben ofrecer todos los días, no vale la pena correr ningún tipo de riesgos. Elegir a los mejores, a los más capacitados, a los que tengan más experiencia en su ramo, siempre será lo más inteligente.
¿Qué servicios se requieren?
Hay dos tipos de talleres. Los que se especializan en una sola cosa y la hacen bien, o los que ofrecen muchos servicios. En este último grupo, también están los que cuentan con la capacidad operativa, tecnológica, de infraestructura y de talento humano para hacer bien cada uno de los servicios que ofrecen. A grandes rasgos, sobre todo si se está buscando un taller de coches de cabecera, estos últimos pudieran ser los más indicados.
Por ejemplo, en un mismo taller especializado en servicios generales se pueden encontrar soluciones de todos los tipos:
- Mantenimiento: todo tipo de mantenimiento programado, mecánica rápida, neumáticos, frenos, pulimento de faros y diagnosis.
- Climatización y electrónica: lo eléctrico y lo electrónico, y por encima de todo, la climatización, terminan incidiendo en el consumo de combustible, en la duración de la batería, en el confort y en la seguridad del coche mismo.
- Todo lo relacionado con la ITV: pasar la ITV no tiene por qué ser un dolor de cabeza. Inclusive si se tiene un coche de hace algunos años y que ya empieza a pasarla de forma bianual. Hay talleres que no solo hacen todo lo relacionado con la Pre-ITV, sino que también pueden pasar la ITV por el cliente, devolviendo el coche con la inspección ya superada.
Así las cosas, dependiendo del servicio que se requiera se debería apostar por un tipo de taller o por otro. La elección en estos casos será muy personal y subjetiva, de acuerdo con el perfil del conductor, con sus requerimientos básicos para el mantenimiento del coche y hasta influyen la marca, el modelo y el año del mismo.
Comodidad e innovación
La tecnología y la innovación son conceptos que van de la mano al momento de elegir un buen servicio de reparación y mantenimiento de vehículos. Y eso implica desde los turismos hasta vehículos de uso industrial. La innovación tecnológica influye mucho en la celeridad para realizar los trabajos, en lo bien que queden una vez realizados, y en la disminución de riesgos y errores una vez que los coches han sido trabajados. Por eso, siempre hay que buscar talleres de coches que innoven, que inviertan, que cuenten con buena maquinaria y mejores profesionales. Será una señal y casi garantía de que todo saldrá bien.
Luego está el tema de la comodidad. ¿Hay que pedir cita previa? ¿Se puede acudir a cualquier hora y ser atendido de inmediato? ¿Los espacios son adecuados para esperar o para dejar el coche? Esos pequeños detalles, que tienen mucho que ver con el gusto personal, también deberían considerarse como esenciales para dar con un buen taller.