Lo más cómodo para ti es que puedas hacer las reformas que desees en tu hogar con una empresa que esté en la misma ciudad que tú. De esta manera, el traslado de los materiales y el personal, al igual que la comunicación, se facilita en gran medida.
Sin embargo, esto tampoco significa que debas conformarte con la opción que esté más cerca de ti, porque no siempre será la que ofrezca servicios que sean los más aptos para ti. Por suerte, internet hace que sea más sencillo contratar servicios que no necesariamente estén tan cerca pero sí al alcance.
Las reformas de viviendas en Valladolid son bastante comunes gracias al auge del sector, lo que ha traído una variedad de empresas que dan opciones más baratas y con una calidad bastante buena para el precio que piden por sus servicios.
Hay que tener en cuenta que las reformas son una inversión algo elevada, y es imposible conseguir una de buena calidad que salga barata directamente. Una reforma mal hecha sale extremadamente costosa al final, así que hay que hallar un equilibrio entre la calidad y el precio, de manera que satisfaga a ambas partes.
Reformar una vivienda aumenta considerablemente su valor para la venta o el alquiler porque se incluyen elementos nuevos. Es verdad que esto no es comparable a una nueva construcción, pero ya sea una remodelación parcial o general, al final se busca que el inmueble mejore y así incremente su precio.
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¿Cuáles son los objetivos de la reforma?
Antes de embarcarte en el proyecto, debes tener en cuenta que los objetivos claros hacen que los resultados sean más limpios y se parezcan más a lo que tengas en mente. Dependiendo de lo que quieras hacer con tu inmueble después de la reforma, te convendrá invertir más o menos en ella.
Si tus planes son vender la vivienda, la idea es aumentar de manera significativa su valor para que la inversión sea lo más beneficiosa posible. Esto implica por lo general un gasto mayor, porque con la reforma se suelen solucionar problemas en las tuberías de agua y en los sistemas de electricidad, solventar las deficiencias en la estructura y reemplazar los materiales que ya estén obsoletos, como los azulejos ya muy desgastados.
Por otro lado, alquilar una vivienda o parte de ella no necesita de unas remodelaciones tan grandes para posicionarla en el mercado. Para estos casos es normal cambiar de forma simple las estancias, por ejemplo, es posible hacer una conexión directa desde un dormitorio a un baño si es para alquilar una habitación.
Finalmente, si es por una cuestión de gustos, puedes ir al ritmo que te permita tu presupuesto y cambiar lo que quieras, tanto si es para reformar un salón como para hacer una renovación completa de la vivienda.
Tipos de vivienda
No es lo mismo reformar un piso que una casa porque en el primer caso hay algunas limitaciones que debes tener en cuenta. La normativa del edificio es una restricción adicional a la de la urbanización, por lo que las remodelaciones se tendrán que hacer con más cuidado.
Las tuberías y los elementos sanitarios, al igual que los materiales y la estructura dentro del apartamento, dependerán directamente de los del edificio. Por ello, tendrás que requerir de los planos y conocer las normas de construcción antes de hacer un cambio de esta magnitud.
En cambio, las reformas en las casas son más libres, lo cual es una ventaja pero también tienen una mayor complejidad. El hecho de no tener una normativa tan estricta que seguir, hace que las posibilidades sean mayores, y por tanto, el trabajo adquiera otras proporciones. El trabajo de tuberías, fontanería, iluminación, entre otros, dependerá exclusivamente de la casa o vivienda.
De la misma manera, las casas en general son más grandes que los apartamentos. Esto hace que los trabajos de reformas integrales impliquen casi siempre una mayor inversión en tiempo y dinero, en comparación con una reforma de la misma magnitud dentro de un apartamento. Todos estos factores apuntan a que es conveniente contratar a una empresa especializada en reformas.