No hace demasiado tiempo atrás, los robots pertenecían exclusivamente a las películas y los libros de ciencia ficción. No obstante, la evolución tecnológica nos ha ido demostrando que no todo estaba tan lejos como imaginábamos y estos dispositivos ya han pasado a formar parte de todo tipo de ámbitos industriales. Uno de los ejemplos más significativos de ello lo encontramos en la automoción y es fundamental analizar cuáles son sus principales usos y tipos para entender cómo va a cambiar el mundo en los años venideros. Porque, lejos de los apocalipsis del séptimo arte, todo apunta a un incremento de la eficiencia, la productividad y la seguridad de los empleados.

La robótica industrial ya trabaja en la automoción

El sector de la automoción es uno de los enclaves industriales en la actualidad, responsable de la fabricación de los vehículos más modernos. No obstante, los avances dentro de dicho sector no solo residen en el diseño y la producción de coches de última generación, sino también los encontramos de forma interna. Concretamente en la implementación de los conocidos como collaborative robot en la dinámica corporativa.

Los grandes retos a los que se enfrenta la automoción ha provocado que se le conceda especial interés a la flexibilidad. Motivo por el que la robótica ocupa un puesto central hoy en día, ganando así una eficiencia incontestable en la rutina productiva. Todo ello generando un entorno colaborativo entre las máquinas y los empleados de lo más eficaz.

Con la robótica, el valor añadido en la industria del automotor llega tanto en el producto como en las diferentes fases de producción. Unos aparatos que trabajan de manera automatizada y resuelven ciertas tareas que ni tan siquiera los operarios son capaces de realizar. Aunque, por el momento, el papel del equipo humano sigue siendo esencial y no parece que esto vaya a cambiar próximamente.

Ventajas de los robots en la automoción

Si bien es cierto que aspectos como la productividad y la rentabilidad son esenciales en cualquier modelo de negocio, las empresas asociadas a la automoción tienen unas exigencias más elevadas si cabe en esta materia. La fabricación de coches es cara y cometer errores resulta inasumible; razón por la que dichas herramientas colaborativas son cada vez más recurrentes.

Además de minimizar los problemas en la cadena de montaje y aumentar la seguridad del espacio de trabajo, estos robots también sirven para minimizar los costes de la empresa. En primer término, supone un gasto elevado; no obstante, los efectos económicos no tardan en dar resultado para así optimizar las ganancias de la compañía en cuestión.

Gracias a la sustancial mejora de la productividad, la empresa resuelve sus labores con mayor rapidez y se adapta a la demanda concreta de cada momento. De ahí que la previamente comentada flexibilidad se vea satisfecha con creces. Los datos afirman que en un solo año se amortiza el robot adquirido en la empresa: un tiempo muy corto si se compara con otras inversiones corporativas.

Usos habituales de la robótica

Pero, ¿qué puede hacer exactamente un robot colaborativo en el ámbito de la automoción? Bien, lo más habitual es que esté destinado a tareas repetitivas, como es el caso de las de montaje y atornillado. Unas labores que se pueden realizar de forma automática y que no requieren la mente de un humano más allá de la programación del robot.

Asimismo, también han pasado a ser relevantes en los controles de calidad, supervisando que los productos carecen de defectos. Lo cual queda muy ligado a su trabajo como supervisores de maquinaria mediante sistemas CNC: un estudio preciso y fiable que vela por el correcto control numérico.

En cuanto a los tipos de robots más comunes, encontramos una amplia variedad de opciones. Los de corte láser, los de fundición de motores o los de supervisión son algunos de los más importantes. Ahora bien, más allá de las prestaciones de la máquina es crucial que el fabricante sea de alto nivel; quien garantizará que dicha tecnología lo da todo en la industria.

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *